Dia a día nos encontramos en Argentina, tasas de impuestos relativamente elevadas al precio normal en la industria de los automotores. Cifras elevadas, por encima del 100%, las cuales dejan el bolsillo del ciudadano en malas condiciones. No solo esto, sino que tambien uno comienza a pagar estos elevados impuestos a partir de que adquiere un auto o moto-vehículo 0km, hasta que se produzca la destrucción total del mismo o sea transferido a otro dueño.
Para adquirir un bien automotor, hoy en día debemos realizar distintos cálculos, tanto en el caso de pagarlo en efectivo como si pensáramos comprarlo en cuotas. En el caso de que decidamos pagarlo en cuotas se nos pedirá un cierto adelanto a fin de que nos sea otorgado el mismo para su posterior uso. El tema a analizar es que normalmente un vehículo de 50 mil pesos es sacado a pagar a 4-5 años, considerando la tasa de impuestos, seguro y patente, esta cifra asciende a unos 2 mil pesos por mes a pagar por 4-5 años.
Al igual que si decidimos comprar un vehículo mediante un préstamo adquirido, caeremos en lo mismo, pagando impuestos elevados más la tasa del préstamo. Al fin de cuentas lo que pocos tienen en cuenta, es que una vez que se adquiere en auto se ingresa en un círculo vicioso, por el cual al cabo de 4-5 años cuando terminemos de pagarlo, tendremos que comprar otro nuevo porque la amortización de estos bienes son considerados de 4-5 años.
Aquí no se trata de asustar al comprador para que evite adquirir un vehículo, sino pensar 2 veces en lo referido a los cálculos de las tasas de los impuestos y compararlos con lo que el trabajador cobra para que no incurra en más préstamos o intereses que arruinen la economía del ciudadano.
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